Al soplo de hielo
de dura nortada
se encostó la mar,
y todo en la arena
fue con la invernada
ruido y soledad.
Mar ancho,mar libre,
voz en el desierto,
toda plenitud:
¿Qué importa que el día
y el campo hayan muerto,
mientras vivas tú?
Barlovento, Jesús Cancio.
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